Lo que veo...

Llegando
estamos
a los primeros
vuelos
de un Cisma
que ya divisa
el menos
cuerdo.
Primeros
vuelos,
y   se palpa
verdad tan clara.

Entrar al Templo
estremece al bueno
que no olvidó
lo que con Fe aprendió:
Cristo presente
y el pueblo en juego con su mente.
La Misa,
plegaria Divina,
y ¿ quién  adora,
con fervor la Santa Hostia?

¡¡Sacrilegios, sacrilegios!!
¡¡Cuántos sacrilegios!!

Sin confesar comulgan,
lo dicen con soltura.
Y  el Cuerpo de Cristo
de mano en mano con el respeto mínimo.....

Poquísimos  diáconos ,
pero  diaconisas para todo,
y en el altar  con el sacerdote
en la Consagración se ponen.
No hay sacristanes,
ellas todo lo hacen,
y llevan al enfermo
el Sacramento
como el quien va
a cualquier lugar,
parándose y hablando
con quien hayan a su paso.

(Igual, los sacerdotes de antaño
que iban sumidos, adorando.)

La Iglesia surgirá:
Cristo Vencerá
con los pocos
piadosos
que Le siguen
y que gimen
adorando
a cada paso.


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Francisco Novo Alaminos
16,3.15
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